Más de mil mujeres y hombres yanaconas y africanos, cientos de españoles y una española emprendieron en 1540 una empresa de conquista inusitada: atravesar el desierto en busca del llamado Cuzco del Mapocho. Lo que encontraron no fue oro ni el paraíso en la Tierra, sino un pueblo
en guerra, hambre y aldeas arrasadas por el fuego.
Registros del proceso de conquista hay muchos; crónicas, documentos y testimonios han configurado una historia oficial por todos conocida. Desde el confín se sitúa en otra vereda –la de las
mujeres, los indígenas, la naturaleza–, convirtiéndose en un original ejercicio de memoria que
resignifica esos hechos. A partir de un rico contrapunto de voces, esta novela, tan bella como violenta, funciona como una perfecta metáfora del eterno retorno en la historia: todo se destruye y
algo nuevo vuelve a construirse.
En esta, su segunda novela, María José Poblete da con un texto que evoca y moviliza, y que nos
interpela en relación con nuestra esquiva identidad mestiza, respondiendo a esas porfiadas preguntas que vuelven incansablemente: ¿quién soy?, ¿quién es el otro?, ¿quién es esa que no soy