Laberintos del presente es la historia de dos personajes que conforman el cara y sello del sujeto posmoderno, el contrapunto entre dos vidas arrojadas a un vacío existencial y que buscan en el olvido un escape. El rasgo realista que encontramos en la narración, sin embargo, es tempranamente alterado por la presencia de elementos oníricos, simbólicos, intersticios que comunican a otras posibles realidades. En efecto, el lector, desde las primeras páginas, empezará a intuir que hay una relación estrecha entre ellos, pudiendo ambos, incluso, ser el mismo personaje. No obstante, aquella posible hipótesis estará desafiada por un ambiente de ambigüedad, sueños y surrealismo que no le permitirán llegar a algo concluyente, porque también todo podría tratarse de una gran metáfora del hombre contemporáneo. Utilizando dos líneas de tiempo, tres puntos de vista narrativos, Laberintos del presente es una novela cautivante, sumergirá al lector en una historia que le será difícil olvidar.