Trazando un recorrido que va de Turkmenistán a Rusia, pasando por México, el Líbano, Tanzania, Haití, Australia y Chile, este libro, que también puede ser leído como un conjunto de crónicas, nos ofrece un viaje por distintos territorios literarios y geográficos a la siga de aquel animal limítrofe que es el ‘perro amarrillo’, el ‘perro errante’ o, como prefiere Rolin, el ‘perro feral’: aquel que, rehuyendo el destino que le fue impuesto por la domesticación, ha vuelto al estado salvaje. Lejos de cualquier condescendencia, Rolin nos ofrece así una mirada aguda, llena de sarcasmo y de melancolía, de estos compañeros en la desolación.