Tres cuentos y una especie de ensayo dan cuerpo a este libro de Ramón Díaz Eterovic. Los cuentos muestran por enésima vez al detective Heredia resolviendo casos muy similares a los que despacha en sus novelas. En cuanto a la especie de ensayo, se trata de una genealogía del propio Heredia, donde se enfatiza su amistad con Simenon, el incansable gato que lo acompaña en sus correrías, bautizado así en honor a Georges Simenon, uno de los padres de este tipo de literatura. No sé si a Simenon le hubiera gustado ver su nombre asociado al de un gato, filosofa Díaz Eterovic, y, aunque la pregunta sigue en pie, da la impresión de que el finado se hubiera aburrido bastante con las intrigas de su epígono local.